La propuesta se desarrolla en un lote esquinero y amurallado al centro-norte de la ciudad de Quito. En el lugar encontramos una casa de estilo moderno construida en los 80`s. A través de los años, la propiedad sufrió algunas modificaciones y permaneció deshabitada por algún tiempo.

El requerimiento inicial fue habilitar este espacio como un comedor ejecutivo durante el mediodía. Desde el inicio de la intervención, la espacialidad y ubicación de la casa evidenciaron un mayor potencial, por lo que el proyecto cambia de dirección. La nueva propuesta de uso fue un bar restaurante abierto durante el día y en la noche, el mismo que cumpla las funciones de restaurant ejecutivo por la mañana y atienda a las necesidades del sector con un componente de ambiente urbano y cultural por las noches.

La base del diseño fue minimizar la intervención, reutilizar lo existente y optimizar recursos. Se parte por descubrir los parches que se le habían hecho a la casa, dejando marcadas las huellas al abrir los espacios para su nuevo uso. Los elementos como paredes, puertas y ventanas preexistentes se convirtieron en materia prima para la nueva propuesta. Es así que elementos que se extrajeron de la casa en el proceso de demolición volvieron a ella para configurar el nuevo espacio. Las ventanas fueron soldadas entre sí y se convirtieron en puertas. Los ladrillos de las paredes conformaron el contrapiso del área de parking. Los pisos interiores pertenecientes a la casa fueron tratados para su reutilización; se respetó la vegetación del lugar y se la reincorporo como parte del espacio.

El proyecto se valió de varias disciplinas durante todos los procesos de diseño: se incorpora lo artesanal en tratamiento de materiales, lo urbano con el nexo del graffiti, lo industrial con piezas reutilizadas y adaptadas a las necesidades.

Se decide colocar como único elemento “ajeno” al espacio al arte. Es así que todas las piezas nuevas son soporte o arte en sí mismo. Se aprovecha la coyuntura del proyecto para generar un taller de graffiti dictado por los artistas y diseñadores Jaime Villaroel y Verónica Ibarra: la propuesta sería producida fuera de la obra en paneles de 2.20×2.20 armados con duelas de madera recicladas. El taller fue el nexo entre el arte urbano y el aprendizaje de sus técnicas con la propuesta arquitectónica. Posteriormente, los paneles se ubicaron de manera aleatoria en el lugar dando como resultado una composición desfragmentada con referencia a la marca y logo de GLITCH (def: error de software por ficheros codificados o dañados que, al ser leídos, forman figuras o imágenes erróneas)

Piezas extras:

– una maquina tejedora de 6.30m de largo, que atraviesa dos ambientes generando una continuidad entre interior y exterior a manera de barra del bar y mesa en el exterior.

– lámparas construidas en obra con envases de vidrio de 5000ml para conservas de alimentos.

– lavacopas del bar está hecho con el fondo de un tanque calentador de agua, que se encontraba en la casa.

– estructura con cables tensados, de los que se descuelga una galería itinerante de arte y fotografía. Inicialmente, se mostrarán fotografías del proceso de construcción del nuevo espacio y fotografías del taller de graffiti para el proyecto. La galería está planteada para que en cualquier momento otra exposición pueda ser implementada.

– mobiliario en tableros de triplex optimizados, cortados en router con un mínimo desperdicio.

Información general

diseño: RAMA estudio

equipo de diseño
Carla Chávez
Felipe Donoso
Carolina Rodas
diseñador gráfico: Jaime Villaroel
cliente: Esteban del Hierro

localización: Pasaje Martín Carrión N30-90 y Mariana de Jesús, La Pradera, Quito-Ecuador

materiales:
– escombros de la misma obra
– duelas recicladas
– madera reciclada
– ladrillos reusados de la construcción existente
– hormigón pulido en pisos
– puertas y ventanas de la construcción existente
– planchas metálicas de CKD

constructor: RAMA estudio

superficie de construcción: 237 m2

superficie del lote: 360 m2

estado: finalizado el 16 de junio del 2015

créditos fotográficos:
Xavier Burneo
Roberto Albán Torres

  • Locales comerciales