En Rama, creemos en una arquitectura que no se limite a construir, sino que sea un acto de responsabilidad y compromiso con el entorno, con la comunidad, con las raíces de los lugares que habitamos. Nuestra práctica busca generar un cambio profundo, un impacto real en la sociedad y el medio ambiente, a través de la reflexión, la experimentación y el respeto hacia lo que ya está, hacia lo que nos ha sido legado y lo que podemos transformar para el futuro. La arquitectura es mucho más que una estructura: es un reflejo de nuestra cultura, de nuestra historia, y debe ser un vehículo de inclusión, empoderamiento y sostenibilidad.
Nuestra visión es una arquitectura que hable de las personas, del espacio que habitan, del vínculo que crean con su entorno y su comunidad. Entendemos que cada proyecto es una oportunidad para reimaginar, no solo el espacio físico, sino las relaciones humanas, el impacto social, y la posibilidad de revalorizar lo existente. En cada intervención, buscamos ser respetuosos con el territorio, recuperar la memoria del lugar, escuchar sus voces y proyectar el futuro con un sentido claro de justicia y equidad.
El estudio ha sido invitado a impartir conferencias y talleres en diversas universidades, tanto nacionales como internacionales. Hemos sido nominados al Swiss Award 2022, así como a Diversity in Architecture (Divia) en Alemania 2024. Ganadores del Holcim Award 2023 y del Ammodo Architectural Award for Social Engagement 2024, También participamos en la exposición Young Architects in Latin America en la International Architecture Exhibition de la Biennale di Venezia y fuimos seleccionados como uno de los estudios ecuatorianos representantes en el Mies Crown Hall Americas.
Además, hemos sido ganadores y finalistas en la Bienal Iberoamericana de Arquitectura y Urbanismo (BIAU) y en la Bienal de Navarra. En varias ediciones, hemos obtenido el Primer Premio y sido finalistas en la Bienal Panamericana de Arquitectura de Quito, tanto a nivel nacional como internacional.
Nuestro trabajo ha sido reconocido con el Premio a la Arquitectura Vernácula por el Ministerio de Cultura del Ecuador. También hemos sido galardonados con el Primer Premio del Consejo Ecuatoriano de Edificación Sustentable (CEES) en el proyecto de barrios sustentables, así como con el Primer Premio Internacional en el concurso para el Corredor Metropolitano de Quito 2019.
La obra del estudio ha sido publicada en numerosos libros, revistas y plataformas digitales de alcance mundial, incluyendo The New York Times, Casa Bella (Italia), el libro Sustainable Living de Taschen, AVivre (Francia) y Green Building (Taiwán), Houses that can sabe he world. (UK)
En Rama, hemos construido un equipo compuesto por un 70% de mujeres, conscientes de que una arquitectura verdaderamente transformadora debe ser también un reflejo de una sociedad más equitativa. Creemos en la necesidad urgente de empoderar a las mujeres jóvenes, no solo en el ámbito del diseño, sino también en la dirección de obra, un espacio históricamente dominado por voces masculinas. Nuestro compromiso con la equidad no es solo una cifra: es una filosofía de trabajo que permea cada proyecto, que enriquece nuestras propuestas y nos obliga a cuestionar constantemente los métodos tradicionales de la práctica arquitectónica. Lo hacemos porque creemos que la diversidad, la inclusión y la colaboración son la base para generar propuestas auténticas y verdaderamente transformadoras.
Nuestros proyectos no son solo un ejercicio técnico; son respuestas profundas a las realidades sociales, culturales y espaciales que nos rodean. Nos enfrentamos a los desafíos del presente con la firme convicción de que podemos construir no solo espacios, sino comunidades. Estamos comprometidos con la regeneración del espacio público, con la densificación de las ciudades de manera responsable, con la reutilización de estructuras existentes, adaptándolas a nuevas necesidades y propósitos. Trabajamos con un enfoque de bajo impacto, porque sabemos que cada acción, cada intervención, debe estar pensada en función del bien común, del medio ambiente y de las generaciones futuras.
En cada uno de nuestros proyectos, no buscamos la perfección formal, sino la adecuación a las necesidades reales de la gente. Queremos construir no solo arquitectura, sino también soluciones: soluciones habitacionales, sociales, culturales. Nos importa más la calidad del uso que la belleza superficial. Sin embargo, cada proyecto es único y responde a una estética que se emplaza en el lugar y se preocupa por el detalle y rigor de su ejecución. Queremos edificios que cuiden el entorno, que integren a sus habitantes, que se adapten con el tiempo, que no terminen en ruinas o en el olvido, sino que sean el reflejo de una comunidad viva, activa, que se reconcilia con su historia mientras proyecta su futuro.
Nuestra práctica es una invitación constante a la reflexión, a la colaboración, a cuestionar los paradigmas establecidos. Estamos comprometidos con una arquitectura que es austera, pero no barata; que enfrenta con coherencia los desafíos contemporáneos; que no responde a una crisis, sino a una decisión consciente de transformar lo que ya existe. En un mundo que cambia rápidamente, nuestra labor es pensar el futuro mientras vivimos el presente, revalorizando lo que ya está, buscando oportunidades para mejorar sin perder de vista la sustentabilidad, la justicia social y el respeto por el medio ambiente.
Rama es un estudio que no solo busca construir, sino que busca contribuir a la transformación de la ciudad, de la sociedad, de la forma en que vivimos. Nuestro trabajo es un compromiso con los más altos estándares de calidad, pero también con el futuro de nuestro planeta y el bienestar de las comunidades que habitan nuestras ciudades. Creemos que la arquitectura debe ser un acto de servicio, de empatía, de respeto a las raíces, pero también de mirada hacia el futuro. Y lo hacemos, de manera concreta, construyendo una nueva forma de habitar, una nueva forma de vivir.
Este es nuestro manifiesto. Es nuestra invitación a repensar la arquitectura, a cuestionar lo establecido, a ser responsables, a ser justos, a ser coherentes. Creemos que podemos construir un mundo mejor, uno en el que la arquitectura sea un puente entre el pasado, el presente y el futuro, entre las personas y su entorno, entre los hombres y las mujeres, entre la ciudad y la naturaleza. Rama es, ante todo, una apuesta por un futuro compartido.